Microsoft resuelve el lag y el tartamudeo en la transmisión introducidos por las actualizaciones de Windows de agosto de 2025
Microsoft resuelve el lag y el tartamudeo en la transmisión introducidos por las actualizaciones de Windows de agosto de 2025
Resumen del incidente
Microsoft ha resuelto problemas graves de lag y tartamudeo que afectaban al software de transmisión en sistemas con Windows 10 y Windows 11 tras la instalación de las actualizaciones de seguridad de agosto de 2025. Los usuarios informaron de una reproducción degradada e interrupciones en las emisiones en directo después de la actualización; la corrección de Microsoft restauró el comportamiento normal en los sistemas afectados.
Los usuarios informaron de «lag y tartamudeo severos» en aplicaciones de transmisión tras instalar las actualizaciones de seguridad de agosto de 2025 en Windows 10 y 11.
Antecedentes y por qué importa
La transmisión en directo o grabada depende de una coordinación estrecha entre la planificación del sistema operativo, los controladores de dispositivos (especialmente GPU y audio) y el software de captura/codificación. Pequeñas regresiones en la latencia, la planificación de CPU/GPU o el almacenado en búfer de audio pueden producir fallos audibles, fotogramas perdidos o una salida entrecortada que resulta inmediatamente evidente para los espectadores y que a menudo es imposible de ocultar en tiempo real.
Para streamers profesionales, radiodifusores, equipos de esports, docentes en línea y empresas que usan vídeo en directo para eventos o comunicaciones, tales interrupciones se traducen directamente en insatisfacción de los espectadores, riesgo de marca y pérdida de ingresos. Incluso los streamers aficionados pueden ver pérdida de seguidores y disrupción en la monetización cuando las emisiones se degradan de forma repetida.
Las actualizaciones acumulativas y de seguridad de Windows ocasionalmente generan regresiones de compatibilidad o rendimiento porque modifican el comportamiento a nivel de kernel, la planificación, las interfaces de los controladores o las primitivas de seguridad. Cuando esos cambios interactúan con software de captura de terceros, controladores de audio virtuales o la aceleración por GPU, el resultado puede ser problemas de rendimiento visibles hasta que Microsoft, los proveedores afectados o los usuarios apliquen cambios mitigadores.
Análisis de expertos y diagnósticos prácticos para los profesionales
Cuando una actualización del sistema coincide con problemas de transmisión, los profesionales deben adoptar un enfoque metódico para confirmar la causa raíz y aplicar mitigaciones. Los pasos siguientes son buenas prácticas generales y no asumen una causa específica en este incidente; son aplicables a la mayoría de las regresiones de rendimiento inducidas por actualizaciones.
Confirme correlación, no solo coincidencia. Compruebe el historial de actualizaciones (Configuración → Actualización y seguridad → Ver historial de actualizaciones) y anote la marca temporal de la instalación en relación con los primeros informes del comportamiento degradado. Cuando sea posible, reproduzca el problema en un sistema de pruebas con el mismo estado de actualización.
Reúna telemetría y registros. Capture los registros de las aplicaciones como OBS, Streamlabs, XSplit, los controladores de captura del proveedor y el Visor de eventos de Windows alrededor del momento del tartamudeo. Las trazas de recursos desde el Administrador de tareas, Monitor de recursos o Process Explorer pueden revelar contención de CPU, GPU, disco o memoria. Herramientas específicas de audio (latencyMon, diagnósticos WASAPI) pueden exponer subdesbordamientos de búfer o picos de latencia del controlador.
Verifique controladores y firmware. Asegúrese de que los controladores de GPU y los controladores de dispositivos de audio estén actualizados y sean compatibles con el estado del sistema operativo después de la actualización. Los controladores suministrados por los proveedores (NVIDIA/AMD/Intel para GPUs, Realtek/Creative para audio integrado y los proveedores de tarjetas de captura) suelen actualizarse tras parches importantes del SO; instalar los controladores certificados más recientes puede resolver incompatibilidades.
Aísle componentes de terceros. Pruebe las transmisiones con configuraciones simplificadas: desactive cables de audio virtuales, filtros o complementos de terceros, la aceleración por hardware en las aplicaciones de captura/codificación y cualquier superposición. Un inicio limpio o un perfil de usuario de prueba puede revelar si un proceso de terceros está interactuando mal con la actualización del SO.
Revierta o difiera cuando sea necesario. Si la actualización es la causa confirmada y el problema es grave, utilice las opciones de reversión/desinstalación de Windows, Restaurar sistema o una copia de seguridad bare-metal para volver a un estado conocido y funcional mientras se espera una solución oficial. Para máquinas críticas en producción, evite aplicar nuevas actualizaciones hasta que se hayan probado en un entorno de prueba.
Casos comparables y contexto de la industria
Históricamente, las grandes actualizaciones de plataforma han causado ocasionalmente regresiones funcionales que afectan al audio, servicios de impresión, almacenamiento o compatibilidad de periféricos. Estos problemas no son exclusivos de un único proveedor y ocurren en plataformas de escritorio cuando se modifican componentes del sistema en profundidad. En los ecosistemas de transmisión y juego, ejemplos de la última década incluyen incompatibilidades de controladores de audio, regresiones de controladores GPU que afectan al ritmo de fotogramas y conflictos de middleware que sólo se manifiestan bajo cargas de E/S elevadas o requisitos de baja latencia.
Para la industria del contenido en directo, incluso breves interrupciones pueden ser costosas. Radiodifusores y streamers profesionales suelen planificar redundancias —codificadores de respaldo, equipos de transmisión secundarios o conexiones de conmutación por error— precisamente porque los cambios de software o de plataforma pueden tener consecuencias externas inmediatas durante eventos en directo.
Riesgos, implicaciones y recomendaciones accionables
El incidente subraya varios riesgos operativos y puntos de actuación para creadores individuales y equipos de TI que soportan flujos de trabajo de transmisión:
Riesgo operativo: Desplegar actualizaciones automáticamente en sistemas de transmisión en producción puede provocar interrupciones no planificadas durante emisiones en directo o sesiones de grabación. Incluso una corrección de Microsoft puede tardar en desplegarse o en propagarse a través de los canales empresariales de actualización.
Impacto reputacional y en ingresos: Las interrupciones en las transmisiones dañan la experiencia del espectador y pueden desencadenar cancelaciones de suscripciones, pérdida de donaciones/patrocinios y deterioro de la confianza de la marca para creadores y organizaciones profesionales.
Recomendaciones accionables para creadores y equipos pequeños:
- Genere una imagen de respaldo y un punto de restauración antes de aplicar actualizaciones en una máquina de transmisión en producción.
- Retrase actualizaciones no críticas hasta después de las emisiones programadas; desactive los reinicios automáticos durante las sesiones en directo.
- Mantenga una segunda máquina mínimamente configurada o una configuración de captura portátil como respaldo intercambiable en caliente para eventos críticos.
- Actualice los controladores de GPU y audio desde los sitios de los proveedores y consulte las notas de la versión de las aplicaciones de streaming tras parches importantes del SO.
Recomendaciones accionables para equipos de TI y operaciones:
- Adopte una estrategia de anillos de actualización: implemente actualizaciones piloto en un pequeño conjunto de máquinas de prueba que reproduzcan las configuraciones de producción antes de un despliegue completo.
- Utilice herramientas de gestión de actualizaciones (WSUS, Microsoft Intune u otras soluciones de gestión de endpoints) para controlar el despliegue de actualizaciones y habilitar desinstalaciones rápidas cuando sea necesario.
- Implemente monitorización y alertas para métricas clave de rendimiento (utilización de CPU/GPU, fotogramas perdidos, subdesbordamientos de búfer de audio) para detectar regresiones de forma temprana.
- Coordine ventanas de publicación con los equipos de contenido y comunique un plan de reversión que incluya responsabilidades claras y puntos de contacto con los proveedores.
Conclusión
Puntos clave:
- Microsoft abordó el lag y el tartamudeo severo que afectaba al software de transmisión tras las actualizaciones de seguridad de Windows de agosto de 2025 en Windows 10 y Windows 11.
- Los flujos de trabajo de transmisión son sensibles a cambios en el SO y en los controladores; las pruebas sistemáticas y el despliegue en entornos de preproducción reducen el riesgo operativo.
- Los profesionales deben recopilar registros y telemetría, verificar controladores, aislar componentes de terceros y estar preparados para revertir actualizaciones en máquinas de producción cuando sea necesario.
- Para emisiones críticas en producción, mantenga redundancia y un proceso documentado de actualización y reversión para limitar el tiempo de inactividad y el impacto reputacional.
Source: www.bleepingcomputer.com